La medicina natural es una gran aliada para combatir estas afecciones. En particular la RHODIOLA, una planta de origen ártico, permite fortalecer el sistema nervioso, combatiendo el estrés, la ansiedad, la fatiga e incluso para dejar atrás cuadros depresivos.
Se destaca por su poder adaptógeno, es decir, que ayuda al organismo a responder y a adaptarse a cualquier estresor normalizando las funciones fisiológicas, modulando y equilibrando los sistemas energético, nervioso e inmunológico aportando los siguientes beneficios:
- Ayudar a lidiar con la tensión al consumirla en situaciones de estrés, aliviando de forma significativa síntomas como la fatiga, dolor de cabeza, irritabilidad, bajo rendimiento entre otros.
- Disminuye los niveles de cortisol, conocida como hormona del estrés y reduce los niveles de ansiedad.
- Es beneficiosa para promover la salud del cerebro y además disminuye la fatiga mental y mejora el rendimiento laboral.
- Combate la depresión gracias a su alto contenido en rosavina y solidrósido, estimula la producción de neurotransmisores como la dopamina y serotonina necesarios para el organismo.
- Puede mejorar los patrones de sueño y aumentar la motivación.
- Refuerza el sistema inmunitario, aumenta nuestras defensas para combatir enfermedades.
Para aprovechar al máximo sus propiedades se debe preparar la infusión añadiendo 1 cucharadita de Rhodiola en una taza de agua y cuando llegue a ebullición apaga el fuego y déjala tapada reposando entre 3-10 minutos. Se filtra y ya se puede tomar la infusión. Se pueden tomar de 2 a 3 infusiones al día.
