La HIERBA DE CHIVO (Epimedium spp.) posee propiedades beneficiosas para la piel, sus antioxidantes ayudan a protegerla del daño causado por los radicales libres.
Reduce la inflamación y calma la piel irritada. Además mejora la circulación sanguínea en la piel, aportando más nutrientes y oxígeno.
Algunos principios activos de la planta pueden ser incorporados en formulaciones cosméticas para aprovechar sus propiedades.
CÓMO PREPARAR EXTRACTO PARA COSMÉTICA
Coloca en un frasco de vidrio limpio y esterilizado las hojas secas de hierba de chivo trituradas, llena el frasco con aceite (que puede ser de almendra, de jojoba o de coco) hasta cubrir completamente las hojas. Cierra el frasco y agítalo suavemente. Deja reposar en un lugar cálido y oscuro durante al menos 4-6 semanas. Agita el frasco cada pocos días para ayudar a la infusión.
Una vez que la infusión esté lista, cuela el aceite usando un colador fino o un filtro de café. Vacía en frascos goteros limpios y esterilizados para su almacenamiento.
¿Cómo usarlo?
- Añade unas gotas del extracto tus sérums faciales para aprovechar sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
- Mezcla el extracto con tus cremas o lociones hidratantes para mejorar la elasticidad de la piel y combatir los signos de envejecimiento.
- Utiliza el extracto en aceites corporales para masajes, ayudando a tonificar la piel y reducir la inflamación.
