Un cuerpo sano está en equilibrio. A diario, el organismo pone en marcha todos los recursos de que dispone para autorregularse y mantener una relativa constancia en la composición y propiedades del medio interno y de sus funciones, es decir para mantener la homeostasis.
No obstante, suceden inevitablemente situaciones o acontecimientos que el organismo percibe como amenazantes o desbordantes produciendo una serie de reacciones diversas que se conocen bajo el nombre de estrés.
Las plantas adaptógenas son aquellas que actúan regulando las funciones fisiológicas y equilibrando nuestro organismo, no actúan sobre ningún órgano específico, sino sobre todo el organismo; de manera que ante las circunstancias de “alarma”, son capaces de ayudarnos para adaptarnos a esta nueva situación, es decir, consiguen que podamos resistir situaciones de estrés.
El estrés prolongado puede tener un efecto debilitador en nuestro sistema inmunitario, en nuestra salud digestiva, en nuestro sistema nervioso y endocrino y en nuestro bienestar general.
La acción principal de las hierbas adaptógenas, es ayudarnos a afrontar y a manejar el estrés y sus efectos en los momentos en que nuestro cuerpo puede que no tenga la fuerza vital necesaria para activar estos recursos.
CARACTERÍSTICAS
Las plantas adaptógenas tienen una serie de características comunes muy concretas y que las identifican como tales. Estas características son:
- No son tóxicas.
- Aumentan la resistencia física y mental.
- Regulan las funciones del organismo.
- No son estimulantes ni tampoco aportan un extra de nutrientes, simplemente actúan equilibrando nuestro organismo según su necesidad.
¿CÓMO FUNCIONAN?
Para poder entender como actuán las plantas adaptógenas en nuestro organismo pongamos como ejemplo un caso de hipertensión arterial.
Sabemos que existen sustancias naturales que bajan la presión, como por ejemplo el ajo. Así mismo, también hay sustancias que la elevan, como la sal.
Los adaptógenos no suben ni bajan la presión arterial sino que tienen la capacidad de regular nuestro organismo
según la necesidad equilibrando la presión arterial de manera natural.
Los adaptógenos también actúan activando nuestra energía física manteniendo nuestra mente relajada si así se requiere,
consiguiendo con ello un estado de fortaleza tanto física como mental.
ALGUNAS PLANTAS ADAPTÓGENAS:
Ashwagandha: Nos aporta energía extra al organismo y es capaz de ayudar a combatir el estrés, la ansiedad, el cansancio, la fatiga y el insomnio.
Maca: Es una raíz originaria de Perú, que aporta energía. También contribuye como regulador hormonal.
Moringa: Una de las plantas con mayor capacidad como antioxidante y recuperador energético.
Reishi: Este hongo es un excelente antioxidante que proporciona bienestar al organismo y provoca que nuestro sistema inmunológico reaccione de forma más rápida.
Rhodiola: Es una planta muy utilizada por sus propiedades para fortalecer el sistema nervioso, evitar la ansiedad, combatir el estrés y la fatiga.
